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Cómo encontrar el mejor presupuesto para reformar una casa

El hogar, desde los remotos orígenes de nuestra historia, ha sido el mejor lugar donde podemos estar; y esto conlleva a que queramos modificarlo a nuestro gusto, ya sea para satisfacer necesidades o para enmendar errores o daños que el tiempo y el uso le ha propinado. Sin embargo, el bello acto de la reforma siempre es un duro golpe a nuestros bolsillos, por lo cual es imprescindible tener en cuenta los siguientes consejos antes de efectuarla.

Piensa en el tipo de reforma

No es absolutamente necesario que las reformas hechas a nuestro hogar sean de magnitud total; es decir, realizadas a toda la casa. Si crees que es tiempo de reformar la tuya, primero pregúntate: ¿qué quiero realmente? ¿Dónde lo quiero hacer? ¿Eso afecta otras áreas de la casa? ¿Otros espacios necesitan una reforma? Si todas tus respuestas te llevan a la conclusión de que la reforma debe ser total, ¡excelente! Ahora puedes seguir con el siguiente paso de la planificación. No obstante, si concluyes que la reforma debe ser parcial, debes establecer tus límites.

Establece los límites

Una vez hayas decidido el tipo de reforma a realizar, debes establecer tus límites presupuestarios. Supongamos, pues, que la conclusión ha sido una reforma total. En este caso definiremos los porcentajes del monto final que irán destinados a cada sección de la reforma, desglosando estos mismos en sus propios porcentajes para los materiales correspondientes a dicha sección, la porción de la mano de obra y demás aspectos que afecten directamente a tu reforma, incluida una reserva.

Así, pues, empecemos dividiendo en partes iguales el 100 % entre la cantidad de áreas que se reformarán; por ejemplo, de ser éstas dos habitaciones, un cuarto de baño, una cocina, una sala de estar y un cuarto de lavado (seis estancias en total), la división inicial es de 16,67 % del presupuesto para cada una. Ahora bien, ¿el cuarto de baño necesita más reformas que el resto de las estancias? Entonces quítale 1 % a cada una y dáselos al baño; ¿es la cocina la que requiere de más y el resto de habitaciones sólo un poco de mantenimiento? Desvía la mayor parte del presupuesto a la cocina, entonces; digamos un 50 %.

Puedes realizar esta limitación teniendo o no un monto en mente; aunque será más claro para ti establecer el porcentaje de las prioridades conociendo tu capacidad.

Establécelos un poco más allá

Prevé los imprevistos. Un dicho reza que es mejor prevenir que lamentar; y durante las reformas (así como en cualquier proceso de construcción) es bastante fácil lamentar algo, por lo que es casi obligatorio mantener un fondo de reserva para imprevistos.

Estos imprevistos pueden abarcar desde material insuficiente para uno o varios de los sectores a reformar hasta un error de construcción que conlleve a rehacer alguna parte de la reforma, sino toda. Es por esto que las planificaciones deben contemplar lo implanificable, ya que puede resultar un gasto superior si no se tenía previsto. Hay tres maneras bastante elementales para evitar este tipo de situaciones:

Compra un poco más de material. Como trataremos un poco más adelante, los materiales son un elemento que requiere especial atención al momento de buscar presupuesto. Ya que estos deben ser atendidos por metro cuadrado de área a reformar, procura comprar algunos metros cuadrados además de los totales; así no correrás el riesgo de que te falten. Y si te sobran, entonces es menos que comprar en tu próxima reforma.

Establece un fondo de previsión. Ya sea que éste fondo forme parte o no del presupuesto total (es decir, esté incluido en el 100 % de tu presupuesto o sea un monto ajeno a él), tener una reserva monetaria nunca está de más. Este dinero extra seguramente te salvará de un aprieto, si es que se presenta; y si no hizo falta utilizar algo de este fondo, ¡es dinero extra para aprovechar!

Contrata una buena mano de obra. Éste es uno de los aspectos más importantes, sino el más. Debes confiar este tipo de proyectos a personas o empresas capaces y preparadas, como DYLCA, para evitar eventualidades desfavorecedoras durante el proceso de reforma. De igual manera, DYLCA irá de la mano contigo para encontrar el mejor presupuesto para tu proyecto, con lo cual tienes doble beneficio.

Trabaja con base en la magnitud de la reforma

¿Ya tienes en mente todos los límites de tu reforma? Entonces es momento de hablar sobre los materiales y las proporciones adecuadas para comprarlos.

Hablemos de los materiales

En este tipo de trabajos, los materiales suelen ser los mismos, con alguna variación dependiendo de la complejidad de la reforma. Cemento, lozas, lonas, arena, madera y demás formarán parte de tus días conforme dure el proyecto. Ahora bien, ¿cuánto deberías comprar? Recuerda siempre trabajar en torno a la superficie a reformar: compra los materiales por metro cuadrado de casa. Es decir: midiendo bien tu casa, podrás conocer la cantidad exacta de pintura, bloques, alicatado y todos los demás menesteres para evitar despilfarros al momento de comprarlos.

Afortunadamente, DYLCA te ofrece ayuda en cada etapa de tu reforma, incluido el cálculo de materiales necesarios.

Planos a la mano

Recuerda que no sólo necesitas el plano final del proyecto, sino todos los planos de instalaciones tanto eléctricas como de tuberías. Una casa no es sólo paredes y techo con los cuales abrigarse, sino que también posee un sistema de arterias que llevan la electricidad y el agua a cada espacio de ella; así como también es menester conocer la ubicación exacta de tomas de corriente y grifos. Los arquitectos de DYLCA se encuentran a tu disposición para brindarte toda la asesoría que necesites al respecto.

Especifica los detalles

No importa cuán diestro sea un arquitecto o un albañil: ellos no son capaces de leer tu mente. Es por eso que debes visualizar cada etapa de tu reforma deseada, especialmente las finales.

Sucede muy comúnmente que los malentendidos llevan a la empresa a hacer algo diferente a lo que pensabas, retrasando el proceso de la reforma incluso hasta muy cerca del principio. Entonces, es preciso que te hagas acompañar de tu arquitecto durante todo el proceso: la medición, la selección y compra de los materiales, la elaboración de los planos…

Procura conseguir el mejor grado de comunicación con la empresa y ésta sabrá lo que realmente deseas. De igual manera, la empresa que vayas a contratar para este servicio debe estar dispuesta a ayudarte y comunicarse fluidamente contigo, como lo hace DYLCA.

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